“Cuando nuestras manos se conectan con un TAMBOR que vibra con nuestra energía, vitalidad, emoción, euforia, esperanza, sensibilidad, entrega, compartir y unidad, volvemos a estar completos.”
Barry Bittman, MD
Otoqui Reyes un hombre negro puertorriqueño Nacido en Río Piedras y , criado entre Carolina y Loíza proveniente de una familia de músicos y bailadores tradicionales de bomba. “Yo estoy escuchando los barriles de bomba desde la barriga de mi mamá, el primer tambor que escuché fue su corazón, y ella embarazada de mí, aún bailaba bomba”
Háblanos acerca de Loiza, ese lugar que te inspira y conecta con la Bomba:
Loiza es una tierra cimarrona lo que significa que fue habitada por descendientes de cimarrones que escaparon de la esclavitud o compraron su libertad, era un lugar que se dividía por el río Grande de Loíza, que desembocaba después en el mar. Una tierra nativa, taína y africana. La bomba tiene esa misma influencia. Entonces, es totalmente diferente a las otras bombas que hay en las otras regiones.
El puertorriqueño afirma que, “estoy escuchando los barriles de bomba desde la barriga de mi mamá, el primer tambor que escuché fue su corazón, y ella embarazada de mí, aún bailaba bomba”
Cuéntanos más acerca de cómo te vinculaste a la bomba:
Mi padre crea su grupo Agüeybaná en donde tiene la bendición, el permiso y la ayuda de la familia Cepeda a través de uno de los hijos del Jesús Cepeda quién es uno de los bailadores principales de la familia, Rubí y Orlando Perucho Cepeda. Al asistir a los ensayos con mi padre empiezo a escuchar la música y se despierta en mí el interés de bailar, mi padre me enseña, y en ese momento yo era como la mascota del grupo, salía con ellxs, bailaba, repetía lo que veía, pero era para una especie de juego. Tiempo después el grupo se rompe, todo el mundo empezó a moverse por su lado y yo de estar tantos años en la bomba, empecé a moverme para otros géneros cómo el hip hop, el breakdance y toda la cosa moderna. Nuevamente mi padre me hace el llamado a retomar la música tradicional para conocer la historia del por qué es la bomba. La bomba fue creada por los puertorriqueños y las tres razas: africanas, Nativa, taína y española. Tenemos esas tres mismas raíces en la bomba, como la tenemos como puertorriqueño, como identidad, y ahí fui yo, entrando otra vez, conociendo otros ritmos de bomba, como la de la región del sur de Puerto Rico, que es Guayama, Ponce, Arroyo, Patilla.
Ahora eres maestro, portador de un legado ancestral, parte de una dinastía que posiblemente continúe con tu hijo, ¿En qué punto sentiste que la bomba tiene un poder transformador en las personas y en ti?
En un taller que yo di hace años para sordo sordomudo, yo guardaba mis dudas, si el taller funcionará. ¿Y cómo va a ser esto? Y yo dije: dale, vamos a hacerlo; di el taller con mi padre, comencé con los pasos básicos. Ellos hacían los pasos básicos en tiempo, todo perfecto. Y yo les preguntaba si tenían alguna duda, pero quién tenía la duda era yo ¿Cómo pueden seguir el sonido del tambor? Ella le hace la pregunta a los jóvenes y los jóvenes se agacharon y tocaron el piso, señalaron el piso. Eso es algo que ellos sienten. Las vibraciones. Ellos lo transmiten según el ritmo, entienden cómo moverse. Y ahí fue que yo dije ¡Oh!, es que esto no es una cosa que tú solamente oyes, es algo que tú sientes En el transcurso de mi movimiento en la bomba y crecimiento que todavía sigo creciendo y aprendiendo, yo dije algo que se siente además de tú escuchar es algo que se siente y eso a mí como que lo estoy contando, es algo que me movió y dije ¡wow!, entonces empecé a ver la bomba en otra perspectiva que es, sentirla. El barril es un tambor, cada tambor que tenemos en la isla tiene un una vibración diferente y cada ritmo tiene esa magia que te hace mover el cuerpo de una manera distinta. Cada ritmo tiene su sabor, tiene su manera, y a partir de ello el cuerpo responde.
La Bomba es un elemento de resistencia, así como también una puesta comunitaria que vincula a todxs, algo hermoso que pasa en la Bomba es la rueda, cuéntanos más acerca de este momento.
La rueda es algo que se utiliza para todo, construida por personas alrededor hasta formar un círculo y en el centro pasa algo importante, esta es una práctica común que tenemos como afros y como nativos. Dentro de la rueda se conoce como el batey, que es una palabra taína nativa que tenemos nosotros, que significa el área donde sucede. Entonces ahí es donde están los instrumentos de la bomba. Y dónde entra la persona que va a bailar. Entonces puede ser en pareja, como puede ser solo. Hay diferentes dinámicas en el área de Santurce o Cangrejo. Sale la pareja, el caballero pasea a la pareja. Le da una vuelta. Y le cede el paso para que salga. La persona que sacó se queda haciendo paso básico, haciendo figureo mientras la dama o la pareja termina de bailar y una vez regresa el abracé otra vez le da una vuelta, saluda y él sale.
La Bomba es un meta-género afropuertorriqueño bailable que emerge, a través del tiempo, de varias y diversas formas bailables africanas y afrodescendientes a través de nuestro archipiélago. Su práctica se daba tanto en las calles y plazas de centros urbanos como en los «soberaos» de las haciendas y plantaciones con grandes contingentes de seres humanos esclavizados. Los géneros bailables que componen este meta-género se conocen hoy por sus nombres propios: candungué, sicá, paulé, holándes, yubá, güembé, leró, gracimá, holandé, calindá, yubá, belén, cunyá, seis corrido y mariandá.
¿Cuáles son esos ritmos que conforman la bomba y si tienen cada uno de estos ritmos alguna connotación en particular para comunicar algo en particular?
Cuando yo aprendí Cuembe, es un ritmo cadencioso, es un ritmo como coqueto, que normalmente eran canciones como un ejemplo: Adiós mis ojitos, adios mis ojitos, adiós mis ojitos. la hacienda ha molido otra vez, adiós mis ojitos, Adiós. Es como un lamento, pero a la misma vez es como, yo me estoy despidiendo, pero estoy hablando también de lo lindo que fue toda la cosa. O sea, es como cadencioso. Es uno de mis ritmos favoritos.
Está el Sika es un ritmo de línea como tinta y tinta, normalmente se utiliza para empezar los bombazos, empezar a prender la bomba con un ritmo sencillo, pero también tiene como su carácter. Es como si quieres aprender bomba, vamos a empezar con él. Esta vez el Yubá es como el que estaba comentando. Es un ritmo de lamentos, un ritmo triste o un ritmo bastante serio. Normalmente en la bomba el Yubá es totalmente distinto a todos los demás ritmos, porqué es en seis por ocho, es un estilo métrico Afro, solamente a la gente súper, súper, súper adulta se les permite interpretarlo. Ninguna persona por debajo de su edad podía bailar bomba. Ellos marcaban quienes bailaban bomba y tenías que ser el más pro o ellos haberte concedido ese nivel, de que tú puedes bailar, pero normalmente solamente a las personas bien adultas.
Es un ritmo serio, un ritmo de mucho lamento, mucha tristeza cargada. También está el holandés, un ritmo con mucha energía, con mucha alegría. Normalmente se utiliza para cerrar la fiesta, cerrar el baile de bomba o el bombazo. Es como en donde normalmente puedes bailar mucho, puedes bailar normal o normalmente se hace como una rueda. Donde yo salgo, bailo, es un poquito hecho todo lo que quiero, me muevo, viene la otra persona y así es como normalmente la bomba baila una persona frente al tambor, solamente una pareja. Una persona sale en pareja, baila la primera persona y baila la segunda y se va. Entonces. Pero si se hace una rueda en esa rueda, una persona sale, baila y la rueda sigue, entra y sale la otra persona. Pero normalmente el holandés es un ritmo con mucha energía, mucha alegría.
Desde su punto de vista, usted nos puede contar cuáles son los aportes puntuales que la cultura africana de ascendencia africana ha hecho en la bomba, tanto, digamos, en la tradicional como en la actual.
Pues mira, empezando por gracias a ellos y ellas tenemos nuestros barriles de bomba. Los hacendados o los españoles no permitían que ellos tocaran o crearan sus propios tambores, por temor a que hicieran brujería y otros miedos. Pues ellos tuvieron que recurrir a los elementos que tenían acceso como los barriles donde cargaban, las carnes y demás alimentos para almacenar en los barcos. Al desecharlos, ellos los tiraban y los africanos los cogían y le ponían cuero de chivo y le ponían cuñas, unos pedazos de madera alrededor y con cal, con candela afinaban el tambor. En esos tiempos también había ron, o sea , se usaban esos también. Obviamente muchas de las canciones tienen lenguaje africano o creole, criollo en Mayagüez, una de las regiones de Puerto Rico.
Entre los africanos y los taínos crearon la bomba con la influencia de los españoles, porque también ellos tenían que ver como ellos estaban bailando. La bomba se usó como manera de comunicación. Ellos cogieron de diferentes partes del oeste de África para que no se pudieran comunicar entre ellos, pero lograron comunicarse a través de la música cuando un modo de comunicación una lengua a través de la bomba.
Ellos lograron comunicarse a través del sonido y el movimiento. Mientras bailaban, hacían movimientos y gestos donde dejaban saber; Hoy nos vamos a escapar a la a la a la. A la hora diez. A las 22:00 de la noche. ¿Eh? Escuché que mañana, eh, se llevan al hijo de Malta. Todo esto, a través de gestos y movimientos. Ellos lograron tener una comunicación para hacer la revuelta, para hacer todo. O sea que la Bomba también fue un medio de comunicación.
Entendemos que, sobre todo en las músicas tradicionales afro, hay un rol muy definido para la mujer, un rol muy definido para el hombre, y esto ha venido evolucionando porque ahora vemos a más mujeres en los tambores y en las voces principales, en este sentido, ¿Es la Bomba un espacio seguro para las diversidades?
Ok, pues mira, si es en Puerto Rico más. En Puerto Rico se han visto muchas personas LGBT en la Bomba, decían que es un lugar seguro. Yo me atrevo a decir que sí han cambiado las cosas, ¿Por qué? Porqué el ambiente de la bomba era un ambiente bastante machista, donde la mujer no se podía acercar al tambor, solamente estaba allí para bailar. Tampoco los bailarines o el que bailaba podía sentarse en un tambor. Porque tú eres bailador. Tú no eres tocador. ¿Qué haces en un tambor? Había una jerarquía muy marcada. Los que bailan, bailan, los que tocan, tocan, los que hacen coro hacen coro. Cada uno tenía su posición y nadie podía estar brincando de un lugar a otro. Y antes el que tocaba ese, moría tocando. El que bailaba moría bailando, El que cantaba moría cantando. O sea, no había esa cosa que tú tenías. Conocías todo. Había personalidades que sabían hacer de todo, pero no era algo muy peculiar. Hoy día en Puerto Rico tú puedes ver a un hombre con una falda bailando. A una chica tocando tambor. Una chica subiendo. En mi grupo y en Puerto Rico. Yo tenía una chica que hacía muy buen trabajo subiendo. Que entrené conmigo.
¿Qué le preocupa en este momento a usted de la bomba y que lo ocupa con la bomba?
La gente dice oye tú, tú tocas, tú cantas bien y uno dice ah, gracias, pero es la gente quien lo dice. Ahora bien, tú no puedes darle clases de bomba y darle un certificado y decirle a un estudiante “¡ya tú eres un bailador de bomba!”, porque se lo va a creer, porque tú como maestro se lo dijiste, pero él tiene que seguir practicando por años, eso es algo que él mismo va entendiendo y encajando y conectando las cosas. Y lo otro que me preocupa es que cada región tiene una, tiene una gracia, tiene algo bonito, algo peculiar. Cada región Santurce. Louisa. Guayama, el área Azul, el área de Mayagüez. Cada región tiene algo peculiar de cada uno de ellos. Lo lindo de Mayagüez. Es como ellos cantan las bombas como ellos hacen. Es lo bonito de Santurce. Ese aire que le dio la familia Cepeda. Lo de Loíza tiene su ritmo y sus movimientos peculiares. Lo mismo Guayama, Arroyo, pero ahora la bomba se ha convertido en una sola cosa, donde yo cojo pasos de Mayagüez, de Santurce, de Loíza, de Guayama y lo mezclo y hago una sola cosa. Entonces dentro de un mismo baile, tú ves todas las regiones. Se puede escuchar bonito, pero no es así. Si tú ves, esa es una de las cosas que a toda persona de mi edad o más arriba le preocupa ver y entristece ver una persona bailando todo lo todas las regiones en una sola, en un solo baile.
¿Por qué es importante seguir enseñando Bomba en Seattle y de qué manera ha impactado tu trabajo con MÁS?
Para mí es importante hacer bomba porque he logrado conectar con puertorriqueños, gente que está, que lleva siete, cinco años aquí y han querido tener la conexión con su cultura o que nunca pudieron tener el acercamiento en Puerto Rico por X o Y razón. Y aquí han podido encontrar la bomba y la posibilidad de poder aprender. Me gusta encontrarme con personas que tienen una manera diferente de aprender, porque así puedo guiarles a donde ellos necesitan con total comodidad y disposición, aprender de eso motiva a las personas. De esta manera, paso a paso, voy acompañándolos en el proceso y se convierte también en un intercambio de conocimientos. Hacer bomba aquí, me hace bien. Tras que a mí me encanta Seattle y hacer bomba aquí afuera, en la calle, en el sol, en los parques, y a la misma vez me mantengo trabajando mi propia cultura fuera de la isla. Sigo practicando, enseñando a la gente que desee aprender.
Me encanta enseñar porque llevo mi bandera en alto, mi cultura en alto, mis tradiciones, quien soy y me mantengo. Y a la misma vez veo a mi hijo que está haciendo la misma historia desde la barriga de Naomi, su mamá, mi esposa. Milvia lo ha visto crecer desde chiquitito, ya trepándose en la tarima, haciendo lo que quiere, lo que siente. Yo no lo fuerzo a tocar, yo no lo fuerzo a bailar. Yo simplemente lo dejo ser porque así fui yo. A mí me dejaron ser en la bomba hasta que entendí que es algo que debo de hacer y lo sigo haciendo hasta el sol de hoy. Ahora viene otro bebé, cuando nazca, así que viene el segundo en la misma historia. Ahí estuvo el bombazo, el sábado con ese bebé se gozó ese bombazo en la barriga igual. O sea, sigo trabajando y ella también siente que es importante. Y seguimos haciendo la misma tradición de incluir, que sea algo que está dentro nuestro ser, desde la barriga.
Las formas bailables actuales de bailes con bombas se basan en las tradiciones danzarias de Loíza, Santurce, San Juan (Barrio la Perla), y Cataño, que a su vez se nutrieron de las de Mayagüez, Ponce, Guayama e Isabela. Este proceso de fertilización cruzada se debió a la gran migración interna de la población afrodescendiente desde toda la Isla hacia San Juan al final de la década de los 1940 y a través de los 1950 (Zelinky, 1949). Durante esas dos décadas el gobierno crea leyes que codifican una política pública cultural que tuvo un impacto formativo en la ejecución de los bailes con bombas